El 16 de noviembre de 1904, John Ambrose Fleming, un ingeniero y físico pionero, hizo un trascendental avance en el mundo de la tecnología al solicitar la patente en Estados Unidos para su revolucionario invento: el diodo de vacío, también conocido como la primera válvula termoiónica. Este dispositivo no solo sentó las bases de la electrónica moderna, sino que también dominó el campo durante casi medio siglo, hasta la llegada del transistor.

Válvula termiónica - 5C3S (Equivalente 5U4G)

Válvula termiónica – 5C3S (Equivalente 5U4G) – Fuente

Las válvulas termoiónicas de Fleming fueron cruciales para el desarrollo de la radio, la televisión y la computación temprana, jugando un papel fundamental en la evolución de la tecnología como la conocemos. La invención del diodo de vacío es considerada uno de los hitos más significativos en la historia de la electrónica, un testimonio del ingenio humano y su incansable búsqueda de innovación y progreso.

 

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